Conocida como la “Florencia del Sur”, Lecce es una de las paradas obligadas en Puglia. Una ciudad donde el arte te rodea en cada esquina con un estilo arquitectónico predominante absolutamente único: el Barroco. El centro histórico tiene numerosas iglesias, elegantes palacios, balcones y terrazas de piedra dicha “leccese”: una piedra blanda y compacta que se puede trabajar fácilmente con un cincel.
Este estilo particular se extendió desde finales del siglo XVI, bajo la dominación española, cuando el rigor de las formas clásicas comenzó a ser reemplazado por la imaginación de los escultores que fueron capaces de dar rienda suelta a su creatividad.
Las bellezas arquitectónicas, la excelente cocina y el mar a pocos kilómetros son algunos de los ingredientes que han hecho de esta joya una de las más apreciadas por los turistas italianos y no italianos.
- 1 Un casco antiguo mágico lleno de maravillas
- 2 Piazza Sant’Oronzo: Donde el Santo protege la ciudad
- 3 Castillo de Carlos V
- 4 Otros monumentos de interés particular en Lecce:
- 5 Gastronomía, no puedes irte de Lecce sin probar…
- 6 Algunas sugerentes imágenes aéreas de Lecce
- 7
- 8 No hay que perderte alrededor de Lecce
Un casco antiguo mágico lleno de maravillas
Porta Napoli marca la entrada al centro histórico caracterizado por muchas iglesias (más de 40), edificios elegantes, plazas adornadas con numerosas tiendas de artesanía (sobre todo de papel maché), bares y restaurantes.
La Basílica de Santa Croce (Via Umberto I) – construida a partir de 1549 – es probablemente el ejemplo más refinado y significativo del Barroco de Lecce. La complejidad de las extravagantes decoraciones realmente lo deja a uno sin palabras. Cada ángulo de la fachada ha sido cuidadosamente cincelado: lo que resulta en una vista impresionante.
Igualmente encantador es el Palacio dei Celestini construido entre 1659 y 1695, situado junto a la Basílica de Santa Croce. Su fachada (y en particular las ventanas ricamente decoradas) parecen mostrar, sin embargo, un estilo bastante sobrio comparado con los “estándares” del Barroco de Lecce. Hoy en día este edificio se utiliza para funciones político-administrativas.
La Catedral de María Santísima Asunta, en la Plaza de la Catedral, es el corazón de la vida religiosa de Lecce. Fue construido a partir de 1144, ampliado en 1230 y luego completamente reconstruido en 1659. El Duomo tiene dos entradas, la principal está frente al Palacio del Obispo, mientras que la segunda está frente a la entrada de la plaza. Para enriquecer la belleza del sitio está el valioso Palacio del Seminario.
Piazza Sant’Oronzo: Donde el Santo protege la ciudad
Plaza Sant’Oronzo es considerada uno de los lugares más elegantes de la ciudad, con muchos bares, tiendas y pequeños restaurantes que harán tu visita aún más agradable.
En esta plaza se puede admirar uno de los más grandes testigos del su antiguo pasado: el Anfiteatro Romano que remonta al siglo II d.C. De la estructura original son claramente visibles la arena, los escalones inferiores y una parte de las paredes externas. Según algunos estudios, podría contener hasta 25.000 espectadores. Fue descubierto sólo en los primeros años del 900 después de la construcción del Palacio del Banco de Italia.
En la Piazza Sant’Oronzo se erige además la columna romana sobre la que se coloca la estatua de San Oronzo, el protector de la ciudad, con los dedos en señal de bendición.
Frente a la estatua, el Palacio del Sedile, que mezclando magníficamente el estilo gótico y el renacentista, no puede pasar desapercibido. Mirando hacia abajo se encuentra un hermoso mosaico que representa el escudo de la la ciudad: una loba bajo una encina y sobre una corona con 5 torres.
Del 24 al 26 de agosto, Lecce honra a su Santo con una suntuosa Fiesta Patronal que culmina con una concurrida procesión que parte de la Catedral de la Piazza Duomo y después de recorrer los puntos más importantes del centro histórico – decorados con sugestivas iluminaciones – termina en el punto de partida.
Castillo de Carlos V
A pocos pasos de la Piazza Sant’Oronzo sobresale el castillo cuadrilátero, construido por el rey Carlos V sobre una antigua fortificación del siglo XII, en 1539. Hoy en día es propiedad del Ayuntamiento y en su interior se celebran a menudo eventos culturales y gastronómicos.
Otros monumentos de interés particular en Lecce:
Monasterio dei Teatini (Via Vittorio Emanuele II)
Un precioso edificio de estilo barroco, actualmente sede de exposiciones y de interesantes actividades culturales. Muy conocida, en particular, una exposición de belenes que tiene lugar durante el período de Navidad.
Iglesia del Carmine (Piazza Tancredi)
Antiguo convento con un claustro cuadrangular. Es la sede del Rectorado de la Universidad de Salento.
Parque Arqueológico de Rudiae
A pocos kilómetros de la ciudad de Lecce – por la carretera de San Pietro in Lama – se encuentra el Parque Arqueológico de Rudiae” uno de los más importantes del Salento. En esta zona se han hallado
tumbas subterráneas excavadas en la roca y restos de fortificaciones Messapianas. Particularmente interesante es el anfiteatro que se ha conservado en excelentes condiciones ya que está situado bajo tierra.
Gastronomía, no puedes irte de Lecce sin probar…
Como en muchos otros lugares de Puglia, la comida es espectacular. Pero son dos, en particular, los productos exclusivamente típicos de Lecce que no pueden faltar:
El “Rustico Leccese”: Se produce utilizando dos discos de hojaldre a los que se añade un relleno de mozzarella, bechamel, tomate y a menudo pimienta y nuez moscada. Se cepilla con huevo y se cuece en el horno.
El “Pasticicotto”: pastelito de masa quebrada relleno de crema y cocidos en el horno.
Algunas sugerentes imágenes aéreas de Lecce
No hay que perderte alrededor de Lecce
Torre Chianca (15 km)
San Foca (24 km)
Torre dell’Orso (27,5 km)
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