La playa de Porto Selvaggio, a medio camino entre Gallipoli y Porto Cesareo, se encuentra dentro del homónimo parque regional Porto Selvaggio-Palude del Capitano.
En 2007, el FAI (Fondo Italiano para el Medio Ambiente) lo incluyó en los “100 lugares para salvar”. Se trata de un área natural protegida de unas 1.000 hectáreas de parque (de las cuales 300 de bosque de pinares). Es sin duda uno de los lugares más fascinantes y salvajes (como dice el nombre) de Puglia.
La zona, anteriormente casi completamente rocosa, a partir de los años 50 ha sido protagonista de un impresionante programa de reforestación que ha dado excelentes resultados. Hoy en día, de hecho, es posible cruzar un espeso pinar y respirar los olores únicos del matorral mediterráneo.
En el interior hay 3 torres costeras (Alto, Uluzzo e Inserraglio) y varias áreas arqueológicas, paleontológicas y naturalistas. A menudo los visitantes pueden observar zorros, erizos, camaleones y especies raras de aves.
La bahía de Porto Selvaggio es una encantadora y pequeña playa de piedra – en la que destaca la Torre dell’Alto – destino muy popular tanto por los bañistas como por los turistas.
Por otro lado, el espectáculo que ofrece a la mirada habla por sí mismo. En algunos puntos es posible lanzarte al mar directamente desde el acantilado y luego disfrutar del panorama entre las aguas cristalinas.
Menos accesible, pero igualmente encantadora, es la Bahía de Uluzzo con la hermosa “Gruta del Cavallo”, donde se puede bucear en el mar desde varias alturas. La gruta está situada a unos 15 metros sobre el nivel del mar.
La peculiaridad de esta playa también está dada por una corriente de agua dulce fría que fluye directamente hacia la bahía.
Algunas imágenes fantásticas de Porto Selvaggio con drone
No hay que perderte:
Sant’Isidoro (10 km)
Gallipoli (15 km)
Porto Cesareo (17 km)
Torre Lapillo (20 km)
Bahia Verde (20 km)
Punta Prosciutto (31 km)
San Pietro in Bevagna (34 km)